Marcelo Vidal, uno de los jugadores del Rojo, se presentó para empezar la pretemporada e integrantes del cuerpo técnico le comunicaron que no sería tenido en cuenta por Almirón. A la salida explotó y descargó su bronca ante los medios.
“Cuando llegamos, a algunos nos mandaron a hablar con el preparador físico. Sacó una lista, nos dijo que no estábamos ahí y debíamos irnos a nuestras casas. Así como llegamos, nos tuvimos que volver”, esgrimió visiblemente molesto y enojado por la situación el mediocampista central.
Lo mismo sufrieron Fabián Monserrat, Rodrigo Gómez, Juan Manuel Trejo y Sergio Ojeda, casi todos de las inferiores del club, que deberán buscarse otro destino para no quedar “colgados” durante el campeonato que viene.
“Fue una falta de respeto enorme y una vergüenza. A mí nadie me dijo nada. Yo me tenía que presentar y así lo hice. Después debía hablar con el técnico para saber si me iba a tener en cuenta o no, pero no estaba él y tampoco un dirigente”, continuó.
“Uno no espera que pasen estas cosas, pero suceden. Hay que ir acostumbrándose, porque es peor si te volvés loco. Yo no tengo nada que hablar con Almirón, fue su decisión y él sabrá, pero tendría que habernos dicho esto cuando terminaba el campeonato o en las vacaciones”, cerró, a la espera de encontrar rápidamente otra institución para seguir desempeñándose.
En tanto, pese a no ser del gusto del DT, Daniel Montenegro estuvo en la concentración y se alista para comenzar con los trabajos de pretemporada junto al resto de sus compañeros.