No se dieron respiro en el José María Minella, donde Estudiantes y Gimnasia empataron 3 a 3. Maximiliano Meza (2) y Lucas Licht aventajaron a los de Troglio; mientras Carlos Auzqui, Luciano Acosta y Diego Vera emparejaron.
Gimansia le ganaba el primer clásico del año a Estudiantes por 3-1 en el José María Minella de Mar del plata y tenía un hombre de más, pero se metió muy atrás y el León se lo empató. Desde los 12 pasos los de Pellegrino confirmaron su envión anímico y ganaron por 4-3 para quedarse con la Copa Ciudad de La Plata , en un encuentro que dejó a ambos equipos con mucho por mejorar en defensa pero que mostró a un conjunto de Pedro Troglio mucho más sólido desde lo colectivo.
El primer tiempo parecía que arrancaba mejor para el Pincha que era más incisivo y ganaba todas las segundas jugadas, pero a los cuatro minutos, un tiro libre en la mitad de cancha terminó en el área de Hilario Navarro, los centrales dejaron picar la pelota y Maximiliano Meza les ganó la espalda para definir ante la salida del arquero que nada pudo hacer para evitar el 1-0.
A partir del gol el Lobo igualó las acciones y empezó a disputarle la tenencia de la pelota al León. Meza y Pablo Vegetti obligaron siempre con mucha movilidad, eso le daba espacios a Javier Mendoza que llega desde atrás. De contra los de Pedro Troglio parecían más amenazantes que además presionaban en cada sector de la cancha y no dejaban hilar jugadas a los de Mauricio Pellegrino.
Pero a los 20 minutos una jugada aislada encontró solo a Diego Vera en el borde derecho del área chica y el uruguayo de chilena reventó el travesaño. Eso le dio confianza a Estudiantes que empezó a meter atrás a Gimnasia y a los 26 minutos tuvo su premio.
Un lateral al área encontró a Facundo Oreja mal parado y cuando quiso rechazar de cabeza, la dejó corta para que Carlos Auzqui de volea ponga el 1-1.
El Lobo pareció despertar del letargo y el partido se hizo de ida y vuelta. Primero se lo perdió Vegetti que reventó el travesaño y minutos después Aguirregaray respondió con una gran contra, pero Yair Bonnin tuvo la reacción necesaria para sacar el remate del uruguayo.
Se iba el primer tiempo cuando en una pelota al área de Estudiantes, Carlos Maglio vio agarrón de Jonathan Schunke sobre Osvaldo Barsottini y pitó penal. Lucas Licht se hizo cargo , esperó que Navarro se incline hacia su derecha y cruzó el remate hacia el otro lado para poner el 2-1 e irse con la ventaja al descanso.
El segundo tiempo mostró a un Gimnasia muy enchufado y con mejor funcionamiento colectivo, mientras que Estudiantes no lograba hacerse con la pelota y sortear la presión del rival. Por ello Pellegrino mandó a la cancha a Luciano Acosta, quien hizo su presentación con la casaca del León.
Aunque el que pegó fue el Lobo a los 64 y de contra. Vegetti engañó a los centrales y dejó pasar una asistencia de Mendoza para habilitar a solo a Meza, la figura del partido . El 7 encaró a Hilario Navarro y definió cruzado para poner el 3-1.
Pero Estudiantes respondió rápido. Israel Damonte hizo rápido un tiro libre ante una defensa desatenta para que Acosta le ganara en velocidad a su marcador, elimine a Bonnin en la carrera y ponga el 3-2. Debut ideal para el ex-Boca que esta misma tarde firmó su contrato.
Aunque quien no tuvo un debut soñado con la casaca albirroja fue el uruguayo Álvaro Pereyra, quien estaba teniendo un partido correcto, pero a los 70 insultó al juez de línea tras una falta sobre Desábato y Maglio lo expulsó.
El Lobo no supo aprovechar el hombre de más y siguió apostando a la contra, mientras que Estudiantes jugaba a la pelota aérea y a ir a la carga contra la defensa del Mens Sana. Tan atrás se metió Gimnasia que a los 91 minutos Diego Vera peinó un tiro libre de Acosta y puso el 3-3 en una definición infartante.
Terminados los 94 minutos, la Copa Ciudad de La Plata se definió desde los 12 pasos. Allí erraron Vegetti y Licht por el lado del Lobo y Acosta para Estudiantes, pero Damonte tenía que embocar el último sí o sí para que el León gane y así fue.
De esta manera Estudiantes le ganó con mística a Gimnasia el primer clásico de año y llega al partido de la Copa Libertadores del próximo jueves contra Independiente del Valle con el ánimo bien arriba. El Lobo tenía el clásico en el bolsillo, ganaba 3-1 y jugaba con un hombre más, pero se durmió y lo terminó perdiendo.