El ciclón alcanzó la categoría 4, pero tocó tierra y perdió fuerza. Ordenan evacuaciones y se preparan para lo peor ante la previsión de inundaciones catastróficas.
Horas de pánico e incertidumbre se viven en Texas (EEUU) tras días de advertencias sobre los posibles efectos del huracán Harvey para este fin de semana. Hay cientos de evacuados y Gobierno anunció a sus habitantes que se preparen para lo peor.
El viernes por la noche Harvey llegó a alcanzar la categoría 4. Este sábado tocó tierra y perdió fuerza, pasando a categoría 3. Luego, hacia las 9 de la mañana, se situó en categoría 2, cuando se desplazaba sobre Texas con vientos de 155 km/h. Ahora se habría retrogradado a categoría 1, pero sigue haciendo destrozos y no descartan inundaciones catastróficas en más de 30 condados.
Se espera que para el domingo, el huracán regrese hacia la costa convertido en tormenta tropical, lo que podría aumentar los peligros de inundaciones en la zona y elevar el nivel del mar hasta 3,6 metros en la zona de la costa situada entre la localidades de Port Aransas y Port O’Connor.
Las góndolas de los supermercados están vacías y hay largas colas para cargar combustible, debido a que la gente se está abasteciendo para hacerle frente y resistir el fenómeno que amenaza con inundar la costa central.
A mediodía del viernes Harvey ya tenía categoría 2 con vientos de 156 kilómetros por hora, pero pasó de tormenta tropical a potencial desastre en apenas 24 horas, alcanzando categoría 3 fortalecido por una temperatura del agua inusualmente alta en el Golfo de México.
Las proyecciones meteorológicas advierten de más de 60 centímetros de agua producto de las lluvias y el Servicio Nacional de Meteorología NOAA no es optimista, ya que prevé “inundaciones con efectos catastróficos y que amenazan la vida” en zonas al sur de Texas.
El ciclón provocará lo que se conoce como marejada ciclónica, un aumento repentino del nivel del mar que puede llegar a casi cuatro metros en algunos puntos.
El Gobierno de Texas ha iniciado los protocolos de emergencia, declarando zona de desastre en 30 condados y puso al Centro de Operaciones del Departamento de Seguridad Pública en nivel de alerta.
Harvey es el primer huracán de categoría 4 o más que golpea EEUU en 13 años y es la primera prueba de fuego del gobierno de Donald Trump en el manejo de una situación de desastre. El presidente norteamericano declaró el estado de catástrofe natural en Texas para acelerar la ayuda en las zonas afectadas.
Se espera que las áreas costeras sean las más afectadas. La ciudad de Port Aransas y los condados de Calhoun, Brazoria, Refugio, Jackson, Nueces, San Patricio y Matagorda emitieron una evacuación obligatoria el jueves para las personas que viven en el área del Golfo de México y el canal intercostero.
En 2005 el huracán Katrina tocó tierra en Nueva Orleans con categoría 3. La ruptura de la presa que defiende a la ciudad del mar provocó una catástrofe de más de 1.200 muertos y 108.000 millones de dólares en daños. Las inundaciones causaron la ruptura de un tanque petrolero en el canal de Houston, afectando a 1.700 hogares.
Wilma fue el último huracán que golpeó territorio estadounidense como huracán mayor (categoría 3), cuando en octubre del año 2005 azotó la costa suroeste de Florida y atravesó la península, donde dejó daños por 16.800 millones de dólares y cinco víctimas mortales, para un total de 22 fallecidos.