El ciclón tocó tierra a 215 kilómetros por hora y arrasó con todo lo que se topó.
El huracán Harvey, el más poderoso en golpear Estados Unidos desde 2005, causó al menos cinco muertos y varios heridos en Texas, donde podría seguir provocando inundaciones “extremadamente graves” a pesar de haber sido rebajado a tormenta tropical.
Una persona falleció tras quedar atrapada en el incendio de su casa durante la tormenta en la región de Rockport, declaró a la prensa un alto responsable del condado de Aransas, en la costa texana, que también dio un balance de 12 heridos leves.
Y en Houston, una mujer se ahogó al salir de su coche en una zona inundada, indicó la prensa local citando a la policía.
Harvey dejó a su paso calles sumergidas, casas sin tejado, carteles de señalización y líneas eléctricas arrancados. En Port Aransas, desertado por sus habitantes, unos barcos fueron a parar en medio de las calles.
Hobby International, uno de los dos aeropuertos de Houston, anunció que todos los vuelos fueron cancelados “a causa de la abundancia de agua en las pistas”, mientras que el George Bush International operaba en forma limitada.
“Se están produciendo súbitas inundaciones, catastróficas, con amenaza de vida”, advirtió el Servicio meteorológico nacional (NWS) en Twitter. “Es una situación EXTREMADAMENTE PELIGROSA! No viaje a menos que se le diga”.
Las tareas para ayudar a los damnificados
Cientos de rescates se realizaron en Houston y muchos más se esperan mientras los socorristas se enfrentan a un severo clima y fuertes aguaceros que complican llegar hasta donde se encuentran las personas más afectadas por Harvey.
En toda la región entre Corpus Christi y Houston, mucha gente teme que el recuento de víctimas apenas comienza. Las autoridades desconocen el alcance total de los daños porque las condiciones climatológicas impiden a los servicios de emergencia llegar a los lugares más afectados.
Además, se teme que la destrucción aumente porque la tormenta podría seguir varios días sobre la zona y descargar más de un metro de lluvia sobre varias ciudades, incluida Houston, la cuarta más grande del país y peligrosamente propensa a las inundaciones.
En Houston, las autoridades pidieron a la gente que no saliera de casa y se declaró una emergencia por inundaciones.
El huracán más potente en golpear a Estados Unidos en más de una década tocó tierra el viernes por la noche a unos 48 kilómetros al noreste de Corpus Christi y alcanzó la categoría 4, con vientos de 209 kilómetros por hora.
Para el mediodía del sábado Harvey se había debilitado a tormenta tropical. A las 4 de la madrugada de hoy, seguía causando “inundaciones catastróficas en el sureste de Texas”.
Fuentes: Agencias AFP y AP