El presidente de Ecuador anunció este sábado que revisará su “sincera decisión” de no aspirar a la reelección en 2017 al considerar que debe garantizar que la “revolución ciudadana” sea “irreversible”.
“Es mi deber revisar la sincera decisión que tomé de no lanzarme a la reelección, porque tengo la responsabilidad de garantizar que este proceso sea irreversible”, expresó Rafael Correa en la comparecencia pública que hace cada sábado, desde la localidad de Gutuglagua.
El mandatario argumentó que “es necesario pensarlo seriamente para dejar la puerta abierta, en el caso de que esos nubarrones”, en alusión a la derecha ecuatoriana, “se hagan aún más grandes”, según informa el diario de ese país ‘El Telégrafo’.
Correa se refirió a las elecciones seccionales que se celebraron el pasado domingo, admitiendo que, “al margen de cualquier cálculo matemático, la derecha ecuatoriana se ha inflado, ha salido fortalecida”.
Con respecto a esto, advirtió de que “la derecha que ganó, por ejemplo, en Quito, no es silvestre, sino que es una derecha organizada, con apoyo extranjero, con estrategia de poder en contra de los gobiernos progresistas del país”.
En este contexto, anunció que el grupo parlamentario de la gobernante Alianza Patria Altiva y Soberana (AP) se reunirá el próximo miércoles para estudiar los cambios constitucionales que serían necesarios para permitir la reelección presidencial.
La presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, explicó que habría que cambiar el artículo 114 de la Constitución, según el cual “las autoridades de elección popular podrán reelegirse por una sola vez, consecutiva o no, para el mismo cargo”, así como el 144, que lo ratifica.
La iniciativa de reforma constitucional será tramitada por la Asamblea Nacional en al menos dos debates y, una vez aprobada, se convocará a referéndum, para cuya aprobación se requerirá al menos la mitad más uno de los votos válidos emitidos.
