Muchos años después de la caída del Tercer Reich, investigadores hallan en territorio austríaco un laboratorio subterráneo nazi. Según comentan los historiadores, el genocida más grande del mundo intentaba obtener la bomba atómica.
Andreas Sulzer es el director de la investigación, quien primero comprobó documentalmente la existencia de este recinto, y luego, detectados altos niveles de radioactividad, se puso al frente de la excavación.
El hallazgo es histórico, cerca de la ciudad ST Georgen an der Gusen, en Austria, que pertenecía en ese momento a la Alemania Nazi, se encontró un sitio subterráneo, dónde Hitler habría puesto en marcha la fabricación de armamento nuclear.
El gran complejo industrial fue encontrado luego de un arduo trabajo, debido a que los nazis lo cubrieron con granito. Se cree que el líder de este proyecto armamentístico fue el general de las SS Hans Kammler, recordado por su crueldad.
“Los prisioneros de campos de concentración en Europa fueron reclutados por sus habilidades especiales – físicos, químicos u otros expertos – para trabajar en este proyecto monstruoso y se lo debemos a las víctimas finalmente abrir el sitio y revelar la verdad”, dijo Sulzer.
Las excavaciones fueron detenidas debido a la necesidad de un permiso especial exigido por la policía, pero Sulzer confía en retomarlas el mes próximo para terminar de desenterrar los secretos que allí se esconden de la Alemania Nazi.
Foto: Sunday Time