El Pentágono recibió la orden para el traslado de los 2.000 uniformados desplegados en territorio sirio. El presidente Donald Trump aseguró haber derrotado al Estado Islámico en dicho país, la cual “era la única razón” para estar allí
Estados Unidos decidió retirar a todas sus tropas desplegadas en Siria, en un traslado que se prevé comenzar en el corto plazo, según informaron fuentes del Pentágono, en una decisión confirmada por un tuit del presidente Donald Trump.
“Hemos derrotado al Estado Islámico en Siria, mi única razón para estar allí durante la Presidencia Trump”, escribió el mandatario este miércoles.
We have defeated ISIS in Syria, my only reason for being there during the Trump Presidency.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 19 de diciembre de 2018
De acuerdo con la cadena CNN, el propio Trump tomó la decisión de efectuar una retirada “completa” y “rápida” de las 2.000 tropas estadounidenses que lideran desde 2014 una coalición internacional contra el terrorismo yihadista.
La decisión fue una de las promesas de campaña de Trump, quien criticó el alto costo del despliegue y el peligro de las misiones en Medio Oriente.
En septiembre, el presidente había adelantado su intención. “Quiero traer a nuestras tropas a casa. Quiero comenzar a reconstruir nuestra nación”, declaró entonces, dejando claro que su prioridad era la lucha contra el yihadismo y había abandonado la idea de forzar la salida del dictador sirio, Bachar al Asad.
De todas formas, pese al enorme retroceso de los yihadistas, muchos de los cuales han escapado a países como Irak y Afganistán, este miércoles el Observatorio Sirio de Derechos Humanos reportó que el Estado Islámico ha ejecutado en los últimos dos meses a cerca de 700 prisioneros en el este de Siria.
La salida de las fuerzas estadounidenses podría implicar una profundización del avance turco, que había frenado sus operaciones contra las Fuerzas de Defensa Sirias, aliadas de EEUU, como una extensión de las milicias kurdas, enemigas de Ankara. Así, la presencia norteamericana significaba un factor de estabilidad en el kurdistán iraquí.
A su vez, podría tener un impacto también en la guerra civil siria, desatada desde el 2011 y con un saldo que ronda el medio millón de muertos, con fuertes intereses de Rusia y el régimen iraní, aliados del régimen de Al Assad.