El sector del comercio en Reino Unido perdió más de 140.000 empleos en 2019, uno de los peores años en un cuarto de siglo, por las graves dificultades que experimentan las tiendas frente al aumento de las ventas en línea, reveló este lunes un estudio.
En total, 143.128 puestos de trabajo han sido suprimidos en los comercios británicos en 2019, lo que significa una media de 2.750 a la semana, según un recuento del gabinete de análisis británico Centre for Retail Research (CRR).
En 2017 se habían perdido 117.425 empleos en este sector.
Es una de las peores cifras desde hace cinco años para el sector, signo de la grave crisis que atraviesa entre la quiebra y las reestructuraciones de varios comercios, y al precio de una desertificación del centro de algunas ciudades.
El CRR explica que los comercios se enfrentan a un gran incremento de sus gastos, un descenso de su rentabilidad y una pérdida del mercado en beneficio de las compras por internet.
“Estos problemas afectan a varias empresas presentes en el comercio físico, en el centro de las ciudades y los centros comerciales”, señala Joshua Bamfield, uno de los responsables del centro de investigación.
“Desde 2015 el débil crecimiento de los gastos de los consumidores se ha traducido en un crecimiento de las ventas en línea en detrimento de los comercios del centro de las ciudades”, indica.
El país ha experimentado varias quiebras desde hace dos años, como las tiendas Debenhams, que fueron tomadas rápidamente por acreedores, o House of Fraser, que acabó siendo adquirida por Sport Direct.
La cadena de tiendas Marks and Spencer, por su parte, también ha anunciado el cierre de varias tiendas.
El CRR se muestra pesimista de cara al año 2020 y espera un alza de las supresiones de puestos de trabajo, cuya cifra podría alcanzar 171.000, si el gobierno no hace nada para ayudar a los distribuidores.