Este martes, cuando se cumplen mil días de la ofensiva rusa contra Ucrania, el presidente Vladimir Putin firmó un decreto que autoriza el uso de armas nucleares ante ataques convencionales si un Estado cuenta con el respaldo de potencias atómicas.
“Entre las condiciones que justifican el uso de armas nucleares figura el lanzamiento de misiles balísticos contra Rusia”, señalaron desde Moscú.
La decisión tomó poco después de que fuera autorizado por los EE.UU. el uso de misiles de largo alcance en manos de Ucrania.
La nueva doctrina indica que se podrá efectivizar el ataque en caso de que el ataque convencional enemigo suponga “una amenaza crítica para la soberanía y (o) integridad territorial”.
“Era necesario adaptar nuestros fundamentos a la situación actual”, indicó el portavoz presidencial, Dmitri Peskov.