Por primera vez en la historia, el dólar superó la barrera de los seis reales en Brasil, generando preocupación en los mercados financieros. La divisa estadounidense alcanzó los 6,0004 reales al mediodía del jueves y cerró en 5,99 reales, según el Banco Central de Brasil. Este récord histórico se produjo en un contexto de incertidumbre sobre el desempeño fiscal del país y tras el anuncio de un paquete de medidas económicas por parte del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
El ministro de Hacienda, Fernando Haddad, presentó el miércoles un programa de ajustes fiscales con el objetivo de tranquilizar a los mercados y fortalecer las finanzas públicas. El plan promete un ahorro de 70.000 millones de reales (unos 12.000 millones de dólares) hasta 2026. “Estas medidas consolidan el compromiso del gobierno con la sostenibilidad fiscal del país”, aseguró Haddad, enfatizando la necesidad de un futuro “más fuerte, justo y equilibrado” para Brasil.
Sin embargo, las medidas no convencieron del todo a los inversores. La Bolsa de São Paulo registró una caída del 2,40 %, y los mercados expresaron su preocupación por algunas decisiones del Gobierno, como las exenciones fiscales para ciudadanos de ingresos medios. Según analistas, estas podrían dificultar el control del déficit público, que se aproxima al 10 % del PBI, y la deuda, que ronda el 80 % del producto interno bruto.
Por su parte, el jefe de gabinete, Rui Costa, acusó al mercado financiero de difundir “noticias falsas” para generar inestabilidad y obtener ganancias extraordinarias de la devaluación. Entre las medidas anunciadas por el Gobierno se incluyen ajustes en el techo salarial y beneficios para empleados públicos, además de la revisión de jubilaciones militares.