Nicolás Maduro asumió este viernes 10 de enero su tercer mandato como presidente de Venezuela, en un acto celebrado en la Asamblea Nacional de Caracas. El evento estuvo marcado por un clima de tensión política y rechazo internacional, mientras la oposición insiste en que el verdadero presidente legítimo del país es Edmundo González Urrutia.
El acto comenzó a las 11:30 (hora Argentina), con la llegada de Maduro a la Asamblea Nacional. Allí, fue recibido por su esposa, Cilia Flores, y otros funcionarios del régimen. Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional, fue el encargado de tomarle juramento.
A diferencia de lo habitual, el evento contó con la presencia de un único jefe de Estado extranjero: el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, lo que refleja el creciente aislamiento internacional del gobierno chavista. Mientras tanto, países como Estados Unidos y miembros de la Unión Europea han reiterado que no reconocen los resultados de las últimas elecciones presidenciales, calificándolas como fraudulentas.
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— Nexofin (@Nexofin) January 10, 2025
Cierre de fronteras y despliegue militar
En un contexto de crecientes tensiones, el premier venezolano ordenó el cierre de la frontera con Colombia horas antes de su juramentación, alegando la existencia de una “conspiración internacional” para desestabilizar su gobierno.
Además, las fuerzas armadas venezolanas desplegaron sistemas de misiles antiaéreos en todo el país, en lo que el comandante estratégico operacional, Domingo Hernández Lara, calificó como un acto de defensa de la soberanía nacional. “La soberanía se defiende”, expresó a través de redes sociales.
Periodistas excluidos del evento
El régimen de Maduro impidió que los periodistas acreditados pudieran ingresar a la sede de la Asamblea Nacional para cubrir el acto. Según denunciaron trabajadores de prensa, únicamente camarógrafos y fotógrafos oficiales tuvieron acceso al lugar.
Esta restricción ha sido criticada por organizaciones internacionales que defienden la libertad de expresión, calificando la medida como un nuevo intento del régimen de controlar la narrativa oficial y silenciar voces críticas.
Ayer, el régimen arrestó y liberó posteriormente a la líder opositora María Corina Machado, quien se había convertido en una de las voces más fuertes contra la legitimidad del gobierno de Maduro.
La oposición continúa apoyando la proclamación de Edmundo González Urrutia como presidente interino, argumentando que su nombramiento respeta la Constitución y representa el verdadero mandato del pueblo venezolano.