Los rectores de las universidades públicas de Argentina han salido a responder enérgicamente las declaraciones del presidente Javier Milei, quien, en un acto reciente, los calificó de “delincuentes” y aseguró que las universidades no quieren ser auditadas. El mandatario hizo estas declaraciones en el evento donde se oficializó el cambio de nombre del Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK) a Palacio Libertad, y las mismas generaron una ola de reacciones en el ámbito académico y político.
Durante el acto, Milei afirmó: “Si hay alguien que está convencido del valor de la educación soy yo. Y por eso creé el Ministerio de Capital Humano. Dejen de mentir, delincuentes que no quieren ser auditados“. Estas palabras resonaron con fuerza y provocaron el rechazo inmediato de los rectores de las 57 universidades nacionales del país.
Alfredo Lazzeretti, rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP), se pronunció en declaraciones a AM 750: “Nos llama la atención el discurso del Presidente, desproporcionado, agresivo. Tratar de delincuentes a los rectores de las universidades nacionales me parece un total disparate que no tiene asidero. Si tiene alguna prueba, que la presente en la Justicia”.
Por su parte, Guillermo Durán, decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), también alzó la voz y calificó los comentarios de Milei como parte de “una decisión política de desfinanciar a las universidades públicas”. En declaraciones a FM Delta, Durán señaló que tanto el presidente como el secretario de Educación, Carlos Torrendell, y el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, “desconocen la realidad y la importancia de las universidades públicas en el país”.
Las declaraciones de Milei se dan en un contexto de creciente tensión entre el gobierno y las universidades públicas, que en los últimos meses han denunciado un recorte en sus presupuestos y una falta de diálogo por parte del Ejecutivo. Los rectores han advertido en repetidas ocasiones que las políticas de ajuste impulsadas por el gobierno están afectando el normal funcionamiento de las instituciones y la calidad educativa que se ofrece a los estudiantes.
Lazzeretti, en este sentido, afirmó: “Nos enfrentamos a un gobierno que ha decidido reducir el financiamiento destinado a la educación pública y eso tiene un impacto directo en la vida de nuestras universidades. Es nuestra responsabilidad defender la autonomía y la calidad de la educación pública, y no vamos a permitir que se nos califique de esta manera sin fundamentos”.
“Las universidades no somos enemigos del gobierno”
Los rectores sostienen que las universidades públicas han sido, históricamente, espacios de formación y producción de conocimiento al servicio de la sociedad. Por ello, afirman que cualquier medida que atente contra la educación pública afecta a la totalidad de los argentinos. En un comunicado conjunto, los rectores reiteraron que las universidades no son “enemigas” del gobierno, sino “aliadas” en la construcción de un país más equitativo y con mayores oportunidades.
Guillermo Durán subrayó: “La educación pública es un derecho y un pilar fundamental en nuestra democracia. Nos preocupa que se busque instalar una narrativa que desprestigie y ataque a las universidades públicas, que son el motor de movilidad social y de desarrollo del país. Invito al presidente y a sus funcionarios a que nos visiten, a que recorran nuestras aulas y laboratorios, y que vean el esfuerzo que hacen docentes, investigadores y estudiantes para salir adelante a pesar de las dificultades”.
Desde las universidades, se ha convocado a una reunión de urgencia para coordinar una respuesta institucional y discutir las medidas a tomar frente a las declaraciones del gobierno. Además, se evalúa la posibilidad de solicitar una audiencia con el presidente Milei para exponer la situación de las universidades y buscar puntos de acuerdo que permitan superar el conflicto.
En paralelo, gremios docentes y organizaciones estudiantiles han expresado su apoyo a los rectores y convocaron a movilizaciones en defensa de la educación pública. La Federación Universitaria Argentina (FUA) anunció que se realizarán asambleas en todas las universidades del país para definir acciones que visibilicen la problemática y demanden al gobierno un cambio de rumbo.
