Según un relevamiento entre grandes grupos, el 50% estima un escenario complicado para 2015, con despidos; una infllación de hasta 40% y un dólar oficial a $12.
La visión de los número uno de las empresas está cada vez más lejos del optimismo. Y a la hora de evaluar las causas que impiden el crecimiento de sus negocios, el escenario político es señalado por la mayoría -64%-como la principal traba.
Los datos surgen de una encuesta realizada por Lide, una agrupación que reúne a líderes empresarios, entre 80 de sus miembros en la Argentina, que están al frente de compañías cuya facturación supera los u$s 100 millones en caso de firmas locales y u$s 300 millones para las multinacionales. El índice de clima empresarial elaborado por la agrupación es de 2,90 puntos sobre 10, el más bajo desde octubre de 2012, cuando alcanzó los 3,59 puntos.
En este marco, sólo el 5% de los consultados prevé tomar nuevos empleados y el 21% realizará despidos de personal. El 74% restante planea mantener su dotación. En junio, el porcentaje de empresarios que preveían despidos era del 10%.
La encuesta también indagó en las cifras que toman en cuenta los líderes empresarios para cerrar sus presupuestos para 2015. La mayoría se basó en un índice de inflación de entre 30% y 40% anual, incrementos salariales en sintonía con la inflación y un tipo de cambio promedio oficial de entre $ 10 y $ 12. Para los directivos, estas variables los obligarán a aumentar las revisiones del cálculo presupuestario, cuidar el capital de trabajo y asignar mayor relevancia a la capacidad de gestión del management, que necesitará adaptarse a los cambios impuestos por el contexto.
También consideran que deberán prever inversiones sólo en la medida que cumplan con los objetivos estratégicos y que tendrán que extremar las acciones destinadas a mantener los niveles de rentabilidad.
La mitad de los ejecutivos, además, consideró que sus negocios marchan peor que en los meses anteriores del año. Otro 40% cree que su situación es igual y apenas el 10% observa una mejoría. Sin embargo, estos números muestran una leve mejoría con respecto a los resultados de junio, cuando el 59% consideraba que sus negocios empeoraban.
En cuanto a los ingresos, la percepción empresaria es un poco más repartida: 33% cree que mejorarán; 38% que seguirán iguales y 29% que serán peores comparados con 2013.
“Para el empresario argentino, el escenario político es el que impide el crecimiento”, señaló Rodolfo de Felipe, presidente de Lide. Este factor fue señalado como la principal traba por el 64% de los líderes encuestados. Otras variables mencionadas fueron el nivel de demanda (29%); las tasas de interés (5%) y la carga tributaria (2%).
Los empresarios también dieron su opinión sobre la eficiencia gerencial del Gobierno, a la que otorgaron 1,55 sobre 10, el nivel más bajo desde que se comenzó a realizar este estudio, en octubre de 2012.
Esta encuesta es realizada por Lide cada tres meses entre sus miembros y los últimos resultados corresponden al mes de septiembre. La metodología utilizada es la misma que se aplica en Brasil -donde Lide cuenta con más de 1.600 miembros e incluye a gigantes como Vale y Petrobras-, lo que permite comparar la visión empresaria en ambos países.
En Brasil, los resultados no son nada alentadores: el índice de clima empresarial es de 3 puntos sobre 10, casi igual que en la Argentina. Aunque en Brasil tuvo una caída más pronunciada, ya que en el mismo período del año anterior llegaba a 4,80 puntos.
En algunos números, los brasileños se muestran incluso más pesimistas que los argentinos: el 30% de los empresarios vecinos prevén despidos (una cifra mayor que en la Argentina) y la eficiencia del Gobierno alcanza apenas 1,30 puntos en una escala de 10. Además, el 44% considera que sus negocios van peor y sólo el 16% ve una mejoría.
Fuente: El Cronista