A pocas horas de cuestionar la “impericia” del oficialismo tras perder un lugar en el Consejo de la Magistratura que le pertenecía a la UCR, los representantes radicales no enviaron ningún representante a la reunión de gestión de esta mañana.
El clima no podría ser más hostil en la coalición gobernante. Cambiemos sufrió en las últimas horas dos duros golpes por parte de la Unión Cívica Radical (UCR). El primero llegó este fin de semana largo, cuando desde la cúpula del partido centenario publicaron un duro documento con las firmas más representativas del espacio, donde tildaron de “impericia” lo ocurrido la semana pasada en las elecciones para el Consejo de la Magistratura, donde una alianza del peronismo con el kirchnerismo derivó en la pérdida de una banca radical en el organismo de control del Poder Judicial.
En la nota difundida anoche en las redes sociales, la UCR plantea la derrota del viernes pasado como “uno de los hechos más relevantes desde que Cambiemos accedió al poder en 2015”, y reiteran las insinuaciones sobre un acuerdo con el PJ por el Presupuesto, las mismas que en las últimas horas agitó con énfasis el diputado Negri. Según esta versión, la derrota en la Magistratura fue parte de un acuerdo entre el PRO y el peronismo, a cambio de la aprobación del Presupuesto y a costa de cargos de la UCR.
El segundo golpe lo asestaron esta mañana, cuando decidieron no enviar ningún representante del radicalismo a la reunión de Gabinete con el presidente, Mauricio Macri.
Mario Negri y Luis Naidenoff, espadas de Cambiemos en Diputados y el Senado respectivamente, se ausentaron a la reunión de hoy, a pesar de haber sido invitados por el equipo de gobierno.