Grasas saturadas: qué son y por qué consumiéndolas con moderación son beneficiosas para el organismo

Dónde se encuentran las grasas saturadas y cómo se deben consumir para beneficio de nuestra salud

Las grasas saturadas han sido muy desprestigiadas en los últimos años. Las podemos encontrar en  la carne de vaca y cerdo que han sido alimentados naturalmente con pastura. Son grasas que forman la estructura del cuerpo de los mamíferos incluyéndonos a nosotros y son buenas cuando están en equilibrio. También podemos encontrar este tipo de grasas en el coco al natural y en su aceite, alimento muy saludable.

Las grasas saturadas son estructura para nuestro cuerpo. El término saturadas significa que no son oxidables, por lo tanto cuando al ingerir carne cocida, al usar aceite de coco, manteca o grasa animal para freír un alimento, no causará oxidación en el organismo.  Muy diferentes son las grasas que sí se oxidan, como el aceite de girasol, soja y maíz.

En una alimentación saludable, las grasas son parte de los nutrientes que se deben integrar a la dieta. También transportan las vitaminas E, A, D y K. En el cambio de paradigma que estamos enseñando en los cursos de nutrición, las grasas en equilibrio son fundamentales además como fuente de energía.

En cuanto a las grasas saturadas y el colesterol

Las grasas saturadas son necesarias en una dieta saludables si estamos en equilibrio con el resto de los alimentos que ingerimos. No es saludable comer grasas con hidratos de carbono, por ejemplo, fideos con tuco y carne.

Las grasas saturadas son moléculas muy diferentes al colesterol. Pero cuando comemos carne estamos ingieriendo tanto grasas saturadas como colesterol, razón por la cual ambas ascenderán en paralelo en nuestra sangre aunque no tengan una relación directa.

En cambio, cuando se consumen grasas saturadas vegetales, por ejemplo provenientes del aceite de coco, no es tanto este paralelismo porque no hay un contenido de colesterol como en la carne.

En cuanto a las grasas saturadas y los triglicéridos, sí hay relación porque en los triglicéridos están incluidas todas las grasas en general. Cuando vemos en un análisis los triglicéridos altos eso corresponde a un conjunto de grasas que pueden ser las saturadas, las omegas 3, 6, 7 o 9.

Cuando se ingieren grasas saturadas de animales de pastoreo o aceite de coco o de manteca (mejor la manteca ghee), no estamos incorporando grasas trans, que son exclusivamente grasas de tipo insaturadas.

Qué son las grasas trans

A diferencia de las grasas saturadas, las grasas trans representan un doble problema para la salud cardíaca, aumentan el colesterol «malo» y reducen el «bueno», inhiben la acción de los ácidos grasos esenciales, retrasando el crecimiento y la maduración del cerebro, como así también ocasionan problemas metabólicos y diabetes, entre otros.

Las grasas trans son compuestos artificiales nocivos que están presentes en diferentes alimentos, grasas y aceites, obstruyen las arterias y aumentan el riesgo de cardiopatía coronaria y se asocian con el mayor riesgo de desarrollo de algunos cánceres.

¿Qué son las grasas trans?  Un tipo de ácido graso insaturado que se encuentra principalmente en alimentos industrializados y su ingesta es perjudicial para el organismo. La mayoría de las grasas trans se forman a través de un proceso industrial que añade hidrógeno al aceite vegetal, lo que hace que el aceite se vuelva sólido a temperatura ambiente.

Este aceite parcialmente hidrogenado es económico y de larga vida, es decir que existen menos posibilidades de que se eche a perder, razón por la cual los alimentos elaborados que las contienen tienen una mayor vida útil. Las trans se utilizan en comidas rápidas, productos comerciales de pastelería, alimentos procesados y fritos.

Consejos para llevar una alimentación saludable

Lo mejor en este nuevo cambio de paradigma es que se quiten de la dieta diaria los alimentos procesados. En primer lugar, dejar las harinas refinadas y el azúcar. Este cambio de paradigma nos acerca a la naturaleza y a los alimentos que salen directamente de ella sin cambios industriales. Incluir en la alimentación frutos secos, carnes, huevos y vegetales orgánicos sin ninguna duda mejorará nuestra salud.