Se la conoce como “droga caníbal”. Una pequeña dosis puede causar desde delirio extremo, agresividad y psicosis, hasta la muerte. Se trata de una sustancia sintética, detectada por primera vez en Asia y en Europa en 2013 y que ya llegó a la Argentina.
En abril, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires detuvo a una persona en un operativo de rutina y descubrió que portaba cinco dosis de Flakka, una droga hasta el momento desconocida en Argentina.
Los oficiales detuvieron un auto que “circulaba sin luces y realizaba maniobras sospechosas”. El conductor era un ciudadano chino de 28 años que no tenía documentos. Las autoridades requisaron el vehículo y descubrieron que transportaba esa sustancia ilegal.
¿Qué es?
La Flakka, 1-Phenyl-(1-pyrrolidinyl)-1-pentanona, también llamada alpha-PVP, pertenece al grupo de las catinonas sintéticas. Sus efectos son principalmente de tipo estimulantes y muchas veces se vende como MDMA. Puede ser consumida oralmente, esnifada, fumada o inyectada.
Entre sus efectos negativos se encuentran: dolor de garganta, dolor en el pecho, irritación en los pulmones, supresión del apetito, sudoración, taquicardia, insomnio, tensión muscular, tensión mandibular, vasoconstricción, dolor de cabeza, ansiedad, agitación, sensación de mareo, debilidad muscular, ataques de pánico, depresión y psicosis.
“La euforia que produce esta sustancia desaparece al poco tiempo, por lo que muchos consumidores sienten la necesidad de consumir de nuevo. Esta sustancia, al igual que otros estimulantes similares, puede provocar tolerancia y dependencia”, advirtieron desde la Sedronar.
El consumo de Flakka se detectó en el 2013 en Asia y en Europa, donde se registraron casos de muerte por su elevada toxicidad. En el continente americano, esta sustancia se encontró en Colombia y en Estados Unidos, principalmente en Florida. De acuerdo a cifras de la Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA por sus siglas en inglés), en 2013 en Florida 132 personas murieron en casos relacionados al consumo de Flakka. En 31 de ellos, la Flakka fue considerada la causa directa de la muerte.
El Informe Mundial sobre las Drogas (2015) de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) indicó que hasta 2014 se relevaron 450 nuevas sustancias psicoactivas, lo que implica que en la actualidad las drogas no fiscalizadas superan a las que sí lo están.